El futuro de los sistemas de almacenamiento de energía en baterías
Jun 20, 2024En los últimos años, los sistemas de almacenamiento de energía en baterías (BESS) se han convertido en un motor central de la transición energética global. Según informes de investigación recientes de la Agencia Internacional de Energía (AIE) y Bloomberg New Energy Finance (BloombergNEF), las inversiones globales en sistemas de almacenamiento de energía en baterías alcanzaron un máximo histórico en 2023, y las tasas de implementación alcanzaron un crecimiento sin precedentes. Esta tendencia no sólo refleja la fuerte demanda del mercado de tecnologías de energía limpia, sino que también resalta el papel crucial que desempeñará el almacenamiento en baterías en los sistemas energéticos futuros.
Tanto el "Informe especial sobre almacenamiento de energía en baterías y seguridad energética" de la AIE como el informe "Perspectiva global del almacenamiento de energía" de BloombergNEF destacan que la inversión global en sistemas de almacenamiento de energía en baterías en 2023 superó cualquier año anterior. El informe de la AIE afirma que la capacidad total instalada de varios sistemas de almacenamiento de energía en todo el mundo en 2023 fue de 42 GW, lo que indica que los sistemas de almacenamiento de energía en baterías recibieron la mayor inversión entre todas las tecnologías del sector energético. Mientras tanto, BloombergNEF estima que el despliegue global de sistemas de almacenamiento de energía (excluido el almacenamiento hidráulico por bombeo) en 2023 fue de 44 GW/96 GWh, casi tres veces la escala de 2022. Se proyecta que la adición global de sistemas de almacenamiento de energía crecerá un 60 % en 2024, alcanzando 67GW/155GWh. Para finales de 2030, la tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del mercado de almacenamiento de energía será del 21%.
Esta tasa de crecimiento significa que para 2030, el despliegue global de nuevos sistemas de almacenamiento de energía alcanzará los 137 GW/445 GWh, y el despliegue acumulado alcanzará los 782 GW/2205 GWh. La tasa de crecimiento de los sistemas de almacenamiento de energía instalados superará con creces la de las instalaciones de energía solar y eólica, y BloombergNEF pronostica tasas de crecimiento anual compuestas del 8,9% y el 6,6% respectivamente para la energía solar y eólica de 2024 a 2030.
Para 2030, China y la región de Asia y el Pacífico dominarán el mercado mundial de almacenamiento de energía. BloombergNEF señala que la continua disminución del costo de los sistemas de almacenamiento de energía en baterías es un factor clave que impulsa una rápida implementación. En febrero de 2024, el coste medio de un sistema de almacenamiento de energía en batería de 2 horas de duración que funciona en China se había reducido a 115 dólares/kWh, una disminución del 43 % en comparación con el mismo período del año pasado.
Impulsada por el mercado chino, la región de Asia y el Pacífico representará la mitad de los nuevos sistemas de almacenamiento de energía del mundo. La región EMEA (Europa, Medio Oriente y África) verá aumentar su participación de mercado del 11% en 2023 al 19% en 2030, mientras que la participación de mercado de América caerá del 28% en 2024 al 19% en 2030. Los estados se convertirán en el segundo mercado de almacenamiento de energía más grande del mundo, agregando 7,4 GW/22 GWh en 2023, con un despliegue acumulado de 134 GW/484 GWh esperado para 2030. Alemania surgirá como el tercer mercado de almacenamiento de energía más grande, con despliegues acumulados que alcanzarán los 62 GW/ 109GWh para 2030.
Los sistemas de almacenamiento de energía en baterías contribuyen significativamente a la transición energética global, impactando no solo al sector energético sino también al sector del transporte. El director ejecutivo de la AIE, Fatih Birol, enfatiza que las industrias de la energía y el transporte son fundamentales para lograr la transición energética y limitar el calentamiento global. Desde 2010, el costo de las baterías de iones de litio ha disminuido aproximadamente un 90%, y una mayor densidad de energía y una vida útil más larga las hacen dominantes en los vehículos eléctricos y los sistemas de almacenamiento de energía en baterías.
A pesar de la ubicuidad de las baterías en la vida moderna, el sector energético, incluidos los vehículos eléctricos y los sistemas de almacenamiento de energía en baterías, representa actualmente el 90% de la demanda de baterías de iones de litio, frente a aproximadamente el 50% en 2016. Los precios de las baterías han caído de 1400 dólares/kWh en 2010 a menos de 140 dólares/kWh en 2023, lo que brindará un fuerte apoyo a la descarbonización de los sectores de energía y transporte.
A pesar del rápido aumento de la tecnología de almacenamiento de energía en baterías, su mayor desarrollo aún requiere apoyo político. BloombergNEF señala que la mayoría de los principales mercados de almacenamiento de energía han establecido objetivos de implementación, y los subsidios gubernamentales y los marcos políticos son cruciales para ampliar la implementación de sistemas de almacenamiento de energía en baterías. El informe de la AIE también señala que, si bien los sistemas de almacenamiento de energía en baterías ya son competitivos en términos de costos en comparación con las centrales eléctricas de carbón en la India, se necesitan mayores reducciones de costos para ampliar las implementaciones.
Además, diversificar la cadena de suministro de baterías es vital. Actualmente, la producción y las cadenas de suministro mundiales de baterías dependen de unos pocos países, lo que plantea riesgos potenciales. BloombergNEF indica que, aunque las inversiones en tecnologías de transición energética en general han aumentado, la expansión de la fabricación de baterías y las inversiones en la cadena de suministro aún son insuficientes para cumplir los objetivos globales de emisiones de carbono.
En conclusión, los sistemas de almacenamiento de energía en baterías desempeñarán un papel indispensable en el panorama energético del futuro. Con avances en tecnología y costos cada vez menores, estos sistemas no solo impulsarán la descarbonización en los sectores de energía y transporte, sino que también proporcionarán una base sólida para la transición energética global. A pesar de los desafíos, el futuro de los sistemas de almacenamiento de energía en baterías sigue siendo prometedor, impulsado por el apoyo político y la demanda del mercado.